viernes, 18 de marzo de 2011

Mandalay (Myanmar) - Mi amigo, el hincha de Boca

Caminaba en mi segundo día en Mandalay. Habia paseado por un curioso mercado donde habia hasta de lo que no existe. Ese día viajaría a Bagan a las 3 de la tarde, por lo tanto, pasear por algunas horas por la ciudad me había parecido la mejor manera de esperar al bus y la mejor manera para ver la idiosincrasia de Mandalay. Había un trafico bastante mas alocado que en Yangon (la otra gran ciudad de Myanmar), motos, pick-ups, y centenares de trishaws adornaban la vista. Un trishaw es una bicicleta con asientos para máximo 3 personas.
Volvía al hostel cuando uno de estos conductores me frenó para llevarme a una famosa pagoda llamada Mahamuni Paya. Me negué, estaba fatigado, no quería ir bajo el sol hacia un lugar donde vería mas budas de los que ya había visto. Me senté con el en la vereda y quedamos charlando una hora, de todo un poco. Confirmé lo que nadie quiere confirmar: en Myanmar hay gran pobreza. Hay cosas que quitan el sueño y hacen un nudo en la garganta y una de ellas es la pobreza de la cual, a pesar del trabajo forzado de muchas víctimas, nadie (o casi nadie) puede safar. Si naciste pobre, así quedas parecieron decirme sus tristes aunque peleadores ojos. Mi nuevo amigo tenia 22 años, hablaba un buen ingles para una persona que aprendió a hablar en la calle, para una persona que vive con menos de 5€ diarios, para una persona que come una vez por día (aunque 3 seria perfecto según su propia observaron), para una persona cuyo trabajo consiste en utilizar la fuerza de sus piernas y el oxigeno de sus pulmones para llevar a "bacanes" turistas (y locales) que no quieren caminar, para una persona abandonada por su novia por no tener dinero...

Unso pueden decir que su trabajo (el de manejar un trishaw) es un trabajo que no se va se erradicar y entonces pagar por un trishaw tiene le ventaja de que al menos, esta gente, reciben dinero de alguna fuente. Otros pueden argumentar que pagando un trishaw se alimenta un trabajo antihumano a altas temperaturas y bajo condiciones macabras... Yo... no se.
El me quería llevar a la pagoda pero yo no quería ir. Ocurrió el típico choque de deseos. Yo estaba cansado, necesitaba relajarme, hacer nada mas que hacer nada. A pesar de mi negativa, mi amigo, quería seguir charlando ya que así mejoraba su ingles. No era su día de suerte, mi ingles había decaído a niveles graciosos desde que empezó el viaje, con leves mejorías tipo el gráfico del coseno de x.
Me rompía el corazón conocer su historia, estaba teniendo un baldaso de realidad burmesa; tantas sonrisas gratis, tanta generosidad, tanta honestidad y tanto servicio que había recibido para ese entonces, se me había olvidado por completo que detrás de ese respeto al turista hay una sociedad que sufre la falta de trabajo digno, la falta de libertad de expresión, la falta de luz (en algunas ciudades pero por supuesto no en la nueva capital donde viven los generales) y otras cosas ocultas que no puedo ver, o por ciego o porque los generales son sabios como serpientes y juegan muy bien a las escondidas.

Uno da por sentado las 3 comidas diarias, las galletitas a media tarde y una ducha calentita al final del día. Acá, la gente se baña en la calle con baldados de fría agua (aunque, admito, que no se necesita agua caliente al ser un lugar tan cálido); en otros lados como Inle Lake se bañan en el río; en otros mas fríos (como el pueblo de montaña o el monasterio donde dormí en el treking de Kalaw hacia Inle Lake - http://unlocodeseo.blogspot.com/2011/03/kalaw-myanmar-el-treking.html) también se bañaban con agua fría pero apuesto a que no era tan placentero con ese frío atardecer...
Esta bien, dirás, pasa en todos lados aunque eso no libera al gobierno del desinterés por su pueblo, es decir, "sus jefes". Ver gente bañandose en la calle en la segunda ciudad mas grande de un país eso si que no lo había visto antes. Y nosotros quejandonos de que el agua del hostel no salía caliente...
Volviendo a mi amigo. Necesitaba la plata, no me estaba mintiendo, no estaba hablando con un tailandés chupasangre (y vuelvo a la carga con los tailandeses, perdón). Pensé que como yo no quería ir a esa pagoda quizá lo que si podia hacer era invitarlo a comer algo y así, por un lado no comería solo y por otro aprendería del joven trabajador, el practicaría su ingles, su estomago estaría mas lleno, todo encajaba según mi esquema. Pero el no quería, el solo quería serme de transporte. Me sentí un poco mal, quizás lo había hecho sentir como si fuera un mendigo o algo así. Definitivamente no fue mi intención. Mientras charlabamos, con momentos de silencio, miles de personas transitaban esa calle: mujeres, niños, monjes y muy pocos turistas. El calor agobiaba a pesar de estar sentado en posición de meditación en una vereda con sombra. Un compañero se le acercó y le ofreció Betel. Mascó por un rato y con perfecto escupitajo mancho la calle a exactamente 1 metro 33 cm de distancia donde no molestaría a nadie. Le pregunté si consumía mucho de eso a lo cual me respondió que no porque mancha los dientes. No me mintió, sus dientes, si bien no perfectos, no estaban manchados con el rojizo veneno del Betel que destruye los dientes. Tenia una mirada de buena persona pero a su vez una mirada de "que mierda voy a hacer hoy sin clientes" que me tiraba de la oreja y me desmoronaba al piso. Que podía hacer? El no quería aceptar mi invitación a comer, yo no quería ir a ningún lado mas que a mi hotel que quedaba a 5 cuadras, darle plata, tampoco era una posibilidad. Pero tampoco quería irme. Por otra parte si seguía ahí charlando con el le quitaría la posibilidad de enganchar a eventuales clientes. Me conocí débil ante el dolor ajeno. Me levanté y sentí los pies pesados.
Hicimos un arreglo, un contrato verdaderamente bilateral donde una de las partes se iba a beneficiar económicamente y otra espiritualmente. El arreglo consistía en violar la promesa que había hecho el día anterior pero decidí que valía la falta; le propuse que me llevase al hotel en su trishaw (eso es lo que había prometido nunca mas volver a hacer) pero que antes pasaríamos a comer algo. Aceptó con sonrisa infantil.
Al llegar al restaurante yo me pedí una especie de sprinroll chino y el... un te. Cuando llegaron los 3 sprinrolls aceptó comer uno y yo dos. Pues hombre, tiene que comer carajo. Comparandonos a ambos uno diría que el muerto de hambre era yo pero el también estaba bien flaco. La comida fue un maratón de charlas sobre fútbol: a mi me gusta mas tevez que Messi, me decía y yo encantado coincidía. Sabia como había sido la quemadura de agua caliente en el cuello de carlitos y se sorprendió cuando le conté que había nacido súper pobre. Me habló de Riquelme y casi salté de la enana mesa como si una rata hubiera pasado a mi lado. Hablamos de Maradona aunque habla como un loco observó generandome una carcajada. Conocía a Crespo pero esta viejo. Higuaín apareció en su lista de conocidos, sabia la delantera argentina en el mundial de sudáfrica. Ni yo me acordaba. Conocía a los dos hermanos... como se llamaban? Milito, no? Se aventuró. Recordó los dos goles de Milito en la final de la champions. Diego Forlán ganó el balón de oro.
Wow flaco!! Sabia mucho de fútbol y eso nos unió aun mas. Compré un panqueque de huevo para hacer un miti y miti. Aceptó porque no le quedó otra, pero con que gusto comió su mitad eh.
Me llevó al hotel y yo, al haber recibido el regalo de su compañía, sentí que le tenia que dar un regalo, un recuerdo que lo acompañará, espero por mucho tiempo: mi camiseta de Boca.
Así que, me despedí del nuevo hincha de Boca y tomé una camioneta hacia la estación de buses.

Uniéndose al pueblo, al Carnaval

La mitad + 2


Próximo pueblo de personas adorables, Bagan.

Quien le quiera mandar un Mail al nuevo xeneize aca dejo su mail: Sevenaungaung@gmail.com
Si vas a Mandalay toma un tour diario con el. Todos ayudando a ungaung!!

4 comentarios:

  1. vamos que ya son dos...amargos

    vini, te felicito por el viaje... quisiera poder hacer lo mismo algun dia.

    un abrazo, nahuel.

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  2. Jajaja, porque llevaste la camiseta al viaje???
    Sos un tierno igual.

    Preguntale si conoce al Piojo López.

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  3. jajaj la lleve porque donde hay un argentino, hay pasión y donde hay pasión esta Boca
    apropósito es una camiseta que me había regalado mi ex novia en mi cumpleaños numero 18 (en 2001)... así que gracias a ella por el regalo. Ahora se lo di a alguien que se lo merecía mas

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  4. idolooooooooooooo!!!
    :)
    nunca un gallina tendria esta posibilidad!!

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