jueves, 26 de marzo de 2015

Lago Atitlan (Guatemala) - Ese bello paisaje chapin

Bus Antigua-Panajachel: 80 quetzales. Duración: 3 horas.

Yo no sabia, ni me había llegado el rumor de que hubiera una belleza de tal magnificencia en Guatemala. Yo no lo hubiera dicho a priori y, aun así, me encontré deleitado en varios pueblos al costado del lago Atitlan que, según cuentan las leyendas, un buen día la tierra vibró con tal intensidad que lanzó hacia el aire la mayor explosión volcánica de la historia.  El silencio abrazó al lugar luego que el derramamiento de lava y las caídas de piedras incandescentes concluyera. Muchos años después los ríos empezaron a llenar la caldera gigantesca que se había forjado y tres impetuosos volcanes se erigieron como toque final a una obra maestra. 

El lago Atitlan visto desde un mirador en San Marcos.

Una buena parte de la población es indígena por lo que se puede decir de antemano que la cordialidad, la sencillez e, incluso, la timidez es moneda corriente. Mucha gente, se acerca a estas tierras atraídos por una energía espiritual (que yo creo que existe) y seducidos por la posibilidad de aprender y practicar la meditación, reiki y otras terapias sanadoras. Incluso se puede hacer Temazcal que no terminé haciendo aunque participé de forma indirecta escuchando varias historias de gente que lo vivió. En el presente estoy tratando de capturar una experiencia en Temazcal de una amiga que anhelo pueda subir pronto.

Yo no sabia. Probablemente sea yo demasiado ignorante. El lago se encuentra a una altura de 1562 metros sobre el nivel del mar (aun así muy por debajo de los 3800 metros del lago Titicana en Bolivia) y los pueblos al borde del lago cristalino se dedican, principalmente, a la agricultura con cultivos de café, aguacate (palta en Argentina), maíz y cebollas. Frijoles, calabaza, tomates y ajos. Chiles verdes, fresas (o frutillas) y pepinos. Toda fuente de alimentos para una población en su mayoría indígena.

Yo no sabia y tampoco hubiera creído que Aldous Huxley, el famoso escritor ingles que escribió de "Las Puertas de la percepción" contando sus experiencias con las mescalina definió al Lago Atitlan como que "toca el limite de lo permisivamente pinturesco con el agregado de varios inmensos volcanes. Es demasiado bueno." El lo consideró el lago mas bello del mundo.

Yo no sabia y, de haberlo hecho, mi ansiedad por verlo en persona me hubiera abatido. El Lago Atitlan esta rodeado de tres volcanes que forman partea del arco volcánico centroamericano: el volcán Atitlan (3537 metros de altura), al noroeste de éste el volcán San Pedro (3020 metros) y al norte el volcán Toliman (3158 metros). Cada uno con su historia. Las laderas del volcán Atitlan están cubiertas de bosque hasta 500 metros por debajo de su cumbre donde se pueden encontrar pequeñas fumarolas donde los indígenas realizan ritos religiosos. Este lugar, parte del cinturón de fuego del pacifico, ha sido testigo de cosas increíbles.

Un atardecer en el lago Atitlan

Jaibalito - Una sorpresa tamaño niño
Bote Panajachel-Jaibalito: 25 quetzales. Duración: 30 minutos.
Hospedaje: Posada Jaibalito. Precio: 35 quetzales. Calidad: Buena

Motivado por la presencia de dos amigas inglesas, enfilamos hacia Jaibalito. Yo lo describiría como un pueblo no tan turístico cuyos dueños son varias docenas de  niños simpáticos con la mejor infancia: esa de juntarse con los amigas y amigos por el barrio (que en este caso es una sola calle angosta de 500 metros con casas a los costados). Cada uno de ellos tenia a su alrededor amigos de todos los estilos.
Es un lugar para ir unos días y relajarse mirando el lago y sus volcanes de fondo o jugar con los niños por las calles. En Jaibalito se encuentra un hotel considerado por la Lonely Planet como el mejor hotel de Guatemala y se llama Casa de Mundo al que se puede acceder caminando para disfrutar sus vistas. Hacia allí encaramos. Claramente no podíamos pagar ese lujo. Pero las chicas si ;)

La imagen que cualquier viajero se lleva tatuada de Guatemala.
La banda unida.
Hermanas y amigas.
Belleza.
El Hotel Casa de Mundo, uno de los mejores de Guatemala según la Lonely Planet. La subida del lago les dejó un balcón bajo el agua. Hacer Snorkel por ahí era sumamente atractivo.
El Lago Atitlan tiene una profundidad máxima de 340 metros. Lo lindo de algunas fotos es recordar lo que se sentía en ese preciso momento, no?

viernes, 20 de marzo de 2015

Antigua (Guatemala) - La ciudad que es un poema (segunda parte)

Yo dormía. Eran aproximadamente las 7 de la mañana. Había pasado 1 año y 7 meses sin escuchar esa voz con acento de la costa mediterránea de Alicante, un acento que adiviné tenia su origen en Elche. Abrí los ojos cansados y me encontré con la sonrisa que me acompañaría durante todo mi sueño por Guate: Toni, uno de los 3 amigos españoles que conocí en Bangkok primero, en la frontera Tailandia-Laos, después, en los exóticos paisajes de Luang Prabang, en la divertida estadía en Vang Vieng, en las playas camboyanas de Sihanouk Ville y en esa experiencia muy recordada por todos los que siguieron este blog por Asia: Ko Rong (el paraíso que bautice como la isla de Lost).
Ese día comenzó otro viaje. Ahora acompañado. Ahora con un maestro.
Lo grandioso de todo es que cualesquiera de los dos, Toni o yo, podríamos decir la frase de arriba - aunque solo yo decía la verdad ;) 

Cerro de la cruz
Caminamos por las calles empedradas dirigiéndonos a la zona norte de la ciudad hacia una colina. A la media hora de caminata llegamos para alucinarnos de una ciudad magnifica. Toda Antigua y sus casas bajas se veían abrazadas por el Volcán de Agua de fondo, al sur, tan inmenso que invitaba a pensar la pequeñez y la fragilidad del ser humano. Algunas personas disfrutan de la playa o de un lago, otros de la montaña, en mis pagos de Buenos Aires disfrutamos del Rio de la Plata y en Antigua, se disfruta también de otro tipo de belleza como ser volcanes de fondo creando una postal ideal. Igual belleza, distinto envase.


En la colina del Cerro de la Cruz.

La gente tranquila y amistosamente se pasea por el cerro de la cruz.

Toni y yo. Un año y 7 meses despues del encuentro en Kaoh San Road.



A place to Stay. Un hostel, una familia

Llegué a Antigua tras media hora de transporte publico desde ciudad de Guatemala. Había llegado a Ciudad de Guatemala tras cruzar por 6 fronteras en un bus del tipo escolar con asientos duros y rectos.
Unas 20 horas de viaje por 30 dolares.
Estaba cansado. Y solo. El bus me dejo en la estación y apenas bajé sonreí. Bueno, a ver, busquemos un hostel, me convenció mi mente queriendo evitar cualquier tipo de confrontación conmigo mismo y tratando de evitar un mal humor que no me llevaría a ningún lado.
Caí ante la primera oferta de un guatemalteco que se me acercó con cortesía. Caminamos unas dos cuadras y llegué: Place To Stay. No se si me quedare pero al menos por hoy estará bien, me dije somnoliento. No sabia en ese entonces que una noche se transformaría en un sinfin de noches y experiencia en esa casa familiar devenida a hostel.
Este hostel fue distinto. Diferente. Los que éramos, unas 7 personas, quizás mas, eramos una familia. Cada uno de ellos era "el hermano de tal característica", o al menos esos pensamientos cruzaban por mi mente al sentarme a ver lo que pasaba a mi alrededor en el cómodo sillón de la galería que daba a un patio cuidado adornado por un conejo que felizmente caminaba sin molestar. Había algo en el ambiente que se respiraba y transmitía seguridad. Festejamos la ultima noche de Hanuka con Raul, el dueño del hostel, y una de mis menos queridas "hermanas": una israelí con pésima energía. Algunos días después, festejamos Navidad.
Raul y Fernando dos grandes próceres de mi estadía por este patrimonio de la humanidad desde 1979.
Toni mi compañero de viaje durante todo Guatemala que conocí en mi anterior viaje por el sudeste asiático. Ahora, devenido, a hermano.
En el techo de A Place to Stay. Navidad 2012
La banda con las que pasamos una navidad inolvidable.
Paso el tiempo y volví a ver esta foto. Me estremecí del placer. 
Las típicas calles de Antigua.
La primer noche (que no es esta) comiendo un asado con mis amigos chapines en A Place to Stay. Toni y Fernando haciendo buenas migas
Una de las fotos que mas me gustan.