No entiendo como la gente sabe en que estación de tren bajarse. Cogí el tren de las 20.15 desde Agra a Jodhpur. Una persona me dijo que llegaría a las 7 de la mañana, otra a las 8, entonces yo, astuto y haragán, me puse el despertador 6.55 suponiendo que llegaría a horario. Me desperté unos 15 minutos antes de las 7 y por casualidad pregunté cuando llegaríamos a Jodhpur. Cuando me dijeron "es la siguiente estación", me apuré para guardar la bolsa de dormir y despabilarme: si no fuese por esa pregunta hubiera seguido de largo. El tren llegó con dos minutos de anticipación! Estaba confundido con la diferencia entre la manera correcta en la cual estaban trabajando los trenes y la manera en la que me habían anticipado. Me pasaré de largo en este viaje? me pregunté con una sonrisa. Mas me vale que no!
Jodhpur y el imponente fuerte Mehrangarh
Mas tarde pensaría en mi actitud: me enfrenté a dos indios, grité y hasta me podría haber peleado. Quien habría ganado? Nadie... La violencia no soluciona nada.
Luego de llegar, ver mi amplia habitación con cama de dos plazas y baño privado por unos 5 dolares la noche me fui a desayunar al techo del hotel con una gloriosa vista. En frente mio se alzó un fuerte inmenso, color rojizo que no esperaba ver. Es interesante viajar sin saber exactamente que hay en cada lugar hacia donde vas, de ese modo uno se sorprende y maravilla mas por lo que sus ojos ven. Recuerdo haber exclamado un ruidoso Wow cuando vi ese paredón de 22 metros de altura allá a lo lejos. Ese fuerte es donde iría mas tarde. Se llamaba Mehrangarh Fort.
La entrada al fuerte sale 300 rupias (o 250 con la tarjeta del estudiante que me sirvió menos que hielo en el polo sur). Con la entrada te dan un audio-guide lo cual es sumamente importante para entender lo que estas viendo. Ojala pudiera replicar las cosas que escuché, que incluyen historia, información y anécdotas, pero es difícil con la cantidad de información que me dieron. Son 33 estaciones y en cada una de ellas hay una explicación o una anécdota que mas de una vez me robó una carcajada. Sumamente interesante. Acá algunas fotos:
El inmenso fuerte fue construido durante el reinado de Rao Jodha, un jefe Rajput del clan Rathore, a partir 1459 y se encuentra a 122 metros por sobre la ciudad.
Jodhpur esta situado en el desierto de Thar. El fuerte fue construido, naturalmente, para defenderse de los ataques de los enemigos.
Adentro del Mehrangarh. El fuerte devenido a museo mantiene viva la cultura del clan Rathore. Hay colecciones de palanquines, instrumentos de música, muebles, pinturas y habitaciones ambientadas como se utilizaban entonces, habitaciones con el armamento (espadas, en general, ya que, al principio, se mostraban reacios al uso de la pólvora.).
La pereza del rey: un Houdah se pone en el lomo de un elefante para transportarse en la guerra. En la parte de adelante iba el rey (o un miembro de la realeza) y atrás el guardaespaldas. Al ser también un símbolo de riqueza, generalmente, se decoraba con joyas y oro.
Vista desde el fuerte Mehrangarh a la ciudad azul. El fuerte Mehrangarh es uno de los fuertes mas grandes de la India.
La ciudad azul. Se dice que el color sirve para ahuyentar el calor y los mosquitos
Un modelo viviente que simula un fumador de opio.
Jodhpur a sus comienzos se benefició del comercio
de opio, cobre, seda, sandalias y café
El hotel Shivam queda cerca de la torre de reloj (clock tower, semejante a la que hay en Retiro), ese lugar y alrededores es magnifico: se llama Sardar Market. Centenares de puestos callejeros que venden desde ropa hasta especias, pasando por frutas, verduras, zapatos y juguetes. Uno camina por esos lugares oliendo la (quizás verdadera?) India. Olores de distinto tipo, algunos picantes, otros relajantes, otros de sabor agradable pero, la mayoría de ellos, totalmente desconocidos. Impresiona ver la cantidad de vacas en la calle y como conviven con la gente (que parece ignorarlas completamente), conviven con un trafico alocado, conviven con centenares de bocinazos y, simplemente, conviven como un actor mas de este confuso escenario. Es extremadamente divertido cuando una vaca se relaja en el medio de la calle y los autos le tocan bocina para que se mueva.
Unos niños después de la escuela
Unos niños después de la escuela
Seguí mi entusiasmado caminar y me senté al lado de unos vendedores de zapatos en la calle. Como disfruta la gente cuando uno se convierte en uno mas de ellos. Como diría el Chavo, abrieron los ojos de huevo tibio cuando me senté a su lado y me charlaban al mismo tiempo que me ofrecían cigarros, te y todo lo que pudieran. Cuando vieron mi cámara me pidieron una foto. Que situación mas tierna, se abrazaban con alegría y al ver la foto sonreían como los niños de hacia un rato. Luego, querían una foto conmigo. Que divertido, pensaba, estaba atontado. Estaba disfrutando mucho de mi momentánea popularidad. Al levantar la vista había no menos de una decena de indios mirando mi interacción con los zapateros. Cada uno de ellos con una sonrisa curiosa. Luego, porque no termina acá, me pidieron si las podía imprimir para ellos! Pero por mas que quisiera, me resultó imposible hacerlo, no habia lugar disponible para lograrlo. Por ultimo... Me dio su ilegible dirección para que se las mande; fue raro ver que pidió ayuda para escribir su nombre. En fin, veremos si puedo enviarles una foto...
Mis amigos, los zapateros
Mis amigos, los zapateros
La entrada de Sardar Market. Centenares de puestos callejeros como en todo India.
La mujeres con sus vestidos...
... y el típico paisaje colorido de la India en Sardar Market.
Un coiffeur afeitando a un cliente en la calle.
Una imagen tan fascinante como recurrente. Las vacas en las calles.
Un hombre fumando una pipa enorme.
Un vendedor callejero de Te.
Esa área de la torre es para estudiarla y dedicarle horas al exótico comportamiento de esta gente que, salvando las excepciones que a menudo te cuento, son muy atentos y cordiales.
Jodhpur me sorprendió en todos los aspectos: a nivel historia, a nivel gente que me trató hermosamente, a nivel ciudad que sobrevive en medio de un desierto y, también, a nivel religioso. A la tarde-noche se escuchan tambores y cánticos a lo lejos que dan sinceras ganas de dejar todo y caminar seducido por ese mágico sonido. Jodhpur es un lugar para visitar, definitivamente.
Jodhpur me sorprendió en todos los aspectos: a nivel historia, a nivel gente que me trató hermosamente, a nivel ciudad que sobrevive en medio de un desierto y, también, a nivel religioso. A la tarde-noche se escuchan tambores y cánticos a lo lejos que dan sinceras ganas de dejar todo y caminar seducido por ese mágico sonido. Jodhpur es un lugar para visitar, definitivamente.
Mas tarde ese día, enloquecí y escribí esto:
No puedo creer lo que estoy viviendo. Esto se asemeja al segundo gol del Diego a los ingleses o, aun mas significativo para mi, al gol de Palermo a River en la semifinal de la Libertadores cuando entró luego de 6 meses de inactividad. No se si es porque esto es fascinante o si es porque se que me quedan pocos días de viaje. Sea como sea, a exprimir esta corta experiencia en el lugar donde todo parece estar patas para arriba.
Debatiendo conmigo mismo si debería agregar o no dicho fragmento al relato decidí que lo correcto era hacerlo. Nada es mas puro y sincero que algo que nos sale del corazón en un momento dado. Quizás uno podría sonrojarse y querer evitar que ciertos sentimientos salgan a la luz por temor al que dirán, pero nada debería avergonzarnos cuando lo que se expresa es un latido del corazón. Es como un tatuaje en la piel, esos sentimientos quedan en un cofre para tener vida eterna en nuestra mente.
Debatiendo conmigo mismo si debería agregar o no dicho fragmento al relato decidí que lo correcto era hacerlo. Nada es mas puro y sincero que algo que nos sale del corazón en un momento dado. Quizás uno podría sonrojarse y querer evitar que ciertos sentimientos salgan a la luz por temor al que dirán, pero nada debería avergonzarnos cuando lo que se expresa es un latido del corazón. Es como un tatuaje en la piel, esos sentimientos quedan en un cofre para tener vida eterna en nuestra mente.
Próximo y ultimo destino en este loco deseo, Pushkar.
Otro genial capítulo de tan linda historia Gabo.
ResponderEliminarGracias por compartir...